Los riesgos del alcohol

El alcohol es una droga que produce efectos negativos sobre el organismo.

Cuando se consumen bebidas alcohólicas, la capacidad de controlar los pensamientos, los sentimientos y los actos se ven afectados. Se puede tener sensación de euforia y perder la capacidad de pensar en las consecuencias de los propios actos al proporcionar una falsa sensación de seguridad.

El alcohol que se ingiere con las bebidas alcohólicas es absorbido por el aparato digestivo, pasa al torrente sanguíneo y, finalmente, en su eliminación interviene el hígado.

El hígado y el cerebro son los dos órganos más perjudicados a largo plazo por el consumo de alcohol, ya que este hábito puede producir cirrosis hepática y encefalopatías.

El alcohol afecta al sistema nervioso produciendo euforia y desinhibición. Esto impulsa a las personas a desarrollar conductas peligrosas, debido a que no valoran los riesgos, motivados por la sensación de seguridad que el consumo de alcohol les produce.

Por esa razón, es frecuente que se produzcan accidentes o que se adopten conductas sexuales de riesgo.

Además, cuando se bebe sin control, se puede llegar a una situación de intoxicación que lleve a un coma o, incluso, a la muerte.

El consumo de alcohol a largo plazo provoca graves problemas de salud que afectan principalmente al hígado y al cerebro.

¿Qué es el alcoholismo?

Cirrosis
hepática.

Úlceras y
gastritis.

Enfermedades
psíquicas,
como
depresión,
alteraciones del
sueño y
psicosis.

Enfermedades
cardíacas.

Disfunciones
sexuales.

Encefalopatías y
enfermedades
relacionadas con el
cerebro, como la
demencia.

Responde las siguientes preguntas:

1.
¿Por qué es importante que las personas que acaban de ingerir bebidas alcohólicas no conduzcan vehículos motorizados?
2.
¿Consideras que el consumo de alcohol debería estar prohibido en nuestra sociedad? Opina al respecto.